Cercano a Anakena podemos encontrar otro balneario un poco más íntimo hablamos de Ovahe. Decimos que es más “íntimo” debido a que hay poca señalizacion para llegar y no es de muy fácil acceso, por lo que se puede decir que aún es casi virgen esta playa.
Ovahe está rodeada de acantilados de origen volcánico, sus aguas de color turquesa y su fina arena de color rosado hacen de este lugar una hermosa postal para descansar. Normalmente es la playa elegida por los mismos nativos para visitar durante sus fines de semana y así escapar de los turistas pero eso no significa que turistas no acudan a este precioso lugar.
Hay que tener precaucion ya que aquí la corriente es más peligroso a comparación de Anakena, incluso Ovahe no está oficialmente catalogada como apta para el baño por lo que no cuenta con salvavidas, servicios higenicos ni locales de comida. Además, el acceso es bastante complicado por lo que se deben pasar por varias zonas de roca volcánica sin un sendero determinado el cual seguir, por lo que se recomienda usar un calzado adecuado como zapatilla deportivas.
